LA COLUMNA: Adiós Río

Siempre Deportes | Jessica Romero Avila.
23 de agosto de 2016.

LA COLUMNA: Adiós Río
Ceremonia de clausura de los JO.
Foto: Siempre Deportes.
Dos días desde que la fiesta terminó y aún no me acostumbro a no tener una mañana llena de deporte e ilusión. Y así pasarán los días, a lo largo de cuatro años más.
La fiesta deportiva mundial ha terminado, no sin antes, dejarnos un gran legado deportivo, cultural y humano.
En un encuentro que sucede cada cuatro años, en donde hasta hace un mes, la expectativa que albergaban unos Juegos Olímpicos en Río de Janeiro era alta y donde no todo el mundo confiaba, los brasileños nos regalaron un escenario cálido y representativo de unos Juegos de Verano, en América.
Río de Janeiro, sin duda, albergó historias de superación, lecciones de vida, vio leyendas consumarse en los escenarios brasileños y fuimos partícipes de récords y hazañas difíciles de superar. Albergó alegrías, pero también llanto, triunfos y frustrantes derrotas, nos regaló esperanza y también desengaño.
Hoy queda más que claro, que no son solo competencias deportivas, es una justa que alberga impresionantes choques culturales, donde, como enseñanza, nos demuestran que cada ser humano, por diferente que sea, puede convivir en un ambiente sano, con otra persona, lejana a su concepción de mundo y vida.
El mundo fue testigo, desde la imponente presentación de Michael Phelps, hasta la consumación del fútbol brasileño, obteniendo el oro en el Maracaná, pasando por la actuación del hombre más veloz del mundo, Usain Bolt; y la musa actual de la gimnasia contemporánea, Simón Biles.
Si nos vamos al ámbito nacional, también nos regaló un sinfín de emociones, desesperación, conformismo y mediocridad pasaba por nuestras mentes, pero al igual, nos mostraba que los mexicanos no se dan por vencidos y aún en el último día, se podía seguir luchando. Luchando aún en contra de las adversidades, nos demuestran que un mexicano, no deja solo a otro mexicano, que los sueños se alcanzan con trabajo y perseverancia, y que defender lo que amas, es lo más importante para alcanzar el triunfo.
Desde la sonrisa de Alejandra Valencia, hasta la emoción e incredulidad de Ismael Hernández, dicho sea de paso, al devoto Germán Sánchez, a la ya consolidada María Espinoza, desde la juventud de Misael Rodríguez, hasta las ganas de Lupita González. Cada uno de ellos le dicen al mundo, que "México también puede".
En aspectos no tan buenos, nos enseña a no confiar del todo en nuestras autoridades y que el deporte, cada vez es un ámbito más corruptible, lo cual, beneficia a unos cuantos y perjudica a un país entero. Nos enseñó a no cegarnos, a no caer en idolatrías mal fundamentadas, que en Brasil, nos hicieron irnos de boca, ante los malos resultados.
Miles de sentimientos y emociones nos deja esta justa olímpica, que cuatro años se me hace mucho tiempo, para dejar de soñar. Solo me queda una cosa más que decir:
¡Gracias Brasil! ¡Gracias Juegos Olímpicos! ¡Nos vemos en Tokio!


Las opiniones. críticas y aseveraciones son responsabilidad de la propietaria de la sección "La Columna".
Previous
Next Post »
Thanks for your comment

martes, 23 de agosto de 2016

LA COLUMNA: Adiós Río

Siempre Deportes | Jessica Romero Avila.
23 de agosto de 2016.

LA COLUMNA: Adiós Río
Ceremonia de clausura de los JO.
Foto: Siempre Deportes.
Dos días desde que la fiesta terminó y aún no me acostumbro a no tener una mañana llena de deporte e ilusión. Y así pasarán los días, a lo largo de cuatro años más.
La fiesta deportiva mundial ha terminado, no sin antes, dejarnos un gran legado deportivo, cultural y humano.
En un encuentro que sucede cada cuatro años, en donde hasta hace un mes, la expectativa que albergaban unos Juegos Olímpicos en Río de Janeiro era alta y donde no todo el mundo confiaba, los brasileños nos regalaron un escenario cálido y representativo de unos Juegos de Verano, en América.
Río de Janeiro, sin duda, albergó historias de superación, lecciones de vida, vio leyendas consumarse en los escenarios brasileños y fuimos partícipes de récords y hazañas difíciles de superar. Albergó alegrías, pero también llanto, triunfos y frustrantes derrotas, nos regaló esperanza y también desengaño.
Hoy queda más que claro, que no son solo competencias deportivas, es una justa que alberga impresionantes choques culturales, donde, como enseñanza, nos demuestran que cada ser humano, por diferente que sea, puede convivir en un ambiente sano, con otra persona, lejana a su concepción de mundo y vida.
El mundo fue testigo, desde la imponente presentación de Michael Phelps, hasta la consumación del fútbol brasileño, obteniendo el oro en el Maracaná, pasando por la actuación del hombre más veloz del mundo, Usain Bolt; y la musa actual de la gimnasia contemporánea, Simón Biles.
Si nos vamos al ámbito nacional, también nos regaló un sinfín de emociones, desesperación, conformismo y mediocridad pasaba por nuestras mentes, pero al igual, nos mostraba que los mexicanos no se dan por vencidos y aún en el último día, se podía seguir luchando. Luchando aún en contra de las adversidades, nos demuestran que un mexicano, no deja solo a otro mexicano, que los sueños se alcanzan con trabajo y perseverancia, y que defender lo que amas, es lo más importante para alcanzar el triunfo.
Desde la sonrisa de Alejandra Valencia, hasta la emoción e incredulidad de Ismael Hernández, dicho sea de paso, al devoto Germán Sánchez, a la ya consolidada María Espinoza, desde la juventud de Misael Rodríguez, hasta las ganas de Lupita González. Cada uno de ellos le dicen al mundo, que "México también puede".
En aspectos no tan buenos, nos enseña a no confiar del todo en nuestras autoridades y que el deporte, cada vez es un ámbito más corruptible, lo cual, beneficia a unos cuantos y perjudica a un país entero. Nos enseñó a no cegarnos, a no caer en idolatrías mal fundamentadas, que en Brasil, nos hicieron irnos de boca, ante los malos resultados.
Miles de sentimientos y emociones nos deja esta justa olímpica, que cuatro años se me hace mucho tiempo, para dejar de soñar. Solo me queda una cosa más que decir:
¡Gracias Brasil! ¡Gracias Juegos Olímpicos! ¡Nos vemos en Tokio!


Las opiniones. críticas y aseveraciones son responsabilidad de la propietaria de la sección "La Columna".

No hay comentarios.:

Publicar un comentario